Un nuevo estudio revela cómo la aridez del combustible y el aumento de las temperaturas están transformando la dinámica de los incendios forestales en Canadá.
La severidad de los incendios forestales en Canadá ha aumentado significativamente en las últimas décadas, impulsada por el cambio climático, según un nuevo estudio publicado por Weiwei Wang y sus colaboradores. Los investigadores emplearon 40 años de datos para construir un modelo de regresión logística multinomial (RLM) que analiza los factores que influyen en la gravedad de la quema en 10 ecorregiones del país. Los resultados subrayan que la aridez del combustible –determinada por la cantidad y el nivel de humedad de la vegetación inflamable– es el factor principal detrás de esta intensificación.
El estudio destaca que las condiciones más extremas se han registrado en las últimas dos décadas, con un impacto más pronunciado en los bosques del norte de Canadá, donde el cambio climático ha jugado un papel crucial. “El aumento de la actividad de incendios en los bosques boreales, especialmente en las regiones septentrionales del planeta, genera graves preocupaciones sobre la salud y el funcionamiento de estos ecosistemas clave para el equilibrio global de carbono”, explica Jianbang Gan, experto en ecología forestal, en un artículo relacionado.
2023: Un año sin precedentes para los incendios forestales en Canadá
El año 2023 marcó un récord histórico con más de siete veces el promedio de superficie quemada. Este fenómeno resalta la necesidad urgente de estrategias efectivas de gestión del fuego para proteger los bosques boreales, que representan una porción significativa de los sumideros de carbono mundiales.
La «gravedad de la quema», una métrica clave empleada para evaluar los impactos ecológicos, ha mostrado un aumento consistente, particularmente durante los meses de verano, cuando las condiciones de sequía y altas temperaturas son más frecuentes.
Impactos regionales y cooperación internacional
Los hallazgos también revelan diferencias regionales en los factores que influyen en la severidad de los incendios. Mientras que en el norte de Canadá el cambio climático es el principal impulsor, en el sur predominan la aridez del combustible y las características de la vegetación.
Ante este panorama, expertos como Gan enfatizan la necesidad de colaboración internacional entre Canadá, Estados Unidos y Rusia, países que comparten el 93% del bosque boreal mundial. Este esfuerzo conjunto es crucial para mitigar los efectos de los incendios forestales y proteger estos valiosos ecosistemas del hemisferio norte.
El cambio climático y los incendios forestales: una tendencia global
Los incendios forestales no solo están afectando a Canadá, sino también a otras regiones del mundo. Estudios recientes publicados en «Science» señalan que la dinámica de la vegetación y las condiciones meteorológicas han sido factores clave detrás de las emisiones de carbono de incendios forestales entre del 2001 y 2023. Además, investigaciones lideradas por Balch muestran que tanto la intensidad como la tasa de crecimiento de los incendios forestales en Estados Unidos han aumentado significativamente entre el 2001 y el 2020.
Estos hallazgos refuerzan la necesidad de abordar el cambio climático como un problema global, ya que sus efectos exacerban los riesgos de incendios forestales, amenazan la biodiversidad y afectan la resiliencia de los ecosistemas en todo el planeta.
*En la creación de este texto se usaron herramientas de inteligencia artificial.