Los avances tecnológicos están transformando el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad. ¿Puede el Cloud Computing contribuir a nuestra salud?

Cada 4 de febrero, el mundo conmemora el Día Mundial contra el Cáncer, una fecha clave para reflexionar sobre los desafíos que representa esta enfermedad, responsable de la muerte de 10 millones de personas al año. En este contexto, la tecnología en la nube se ha convertido en una herramienta fundamental para mejorar la detección, diagnóstico y tratamiento del cáncer, revolucionando la manera en que médicos, investigadores y pacientes enfrentan esta condición.

La tecnología como aliada en la lucha contra el cáncer

El cáncer es una enfermedad con una historia milenaria. Se han encontrado referencias sobre ella en registros del antiguo Egipto de hace 5.000 años. A pesar de los avances en la investigación y los tratamientos, su incidencia sigue en aumento. Según la Organización Panamericana de la Salud, se estima que los casos de cáncer en la región de las Américas crecerán un 60% para el 2025, alcanzando los 6,7 millones.

Ante este panorama, el Dr. Rowland Illing, médico jefe y director del Sector Público Internacional en AWS, destaca: Aunque la tecnología no es una bala de plata que erradique el cáncer, es una herramienta fundamental para los verdaderos héroes. Y añade: “He experimentado de primera mano cómo la tecnología hace más eficientes las investigaciones, más precisos los diagnósticos y más accesibles los cuidados remotos”.

La computación en la nube ha demostrado ser una solución clave por su escalabilidad y asequibilidad, permitiendo un mejor abordaje del cáncer tanto para médicos como para pacientes. A su vez, la inteligencia artificial (IA) y el machine learning (ML) facilitan el análisis de datos a gran escala, mejoran la comprensión de la genética de los tumores y promueven el intercambio de hallazgos en la comunidad científica.

Investigación oncológica: el impacto de la secuenciación del genoma

El cáncer es una enfermedad que se origina en mutaciones genéticas, provocando un crecimiento celular descontrolado. Su tratamiento es complejo porque las células cancerosas continúan mutando a medida que la enfermedad avanza. La clave para combatirla está en analizar grandes volúmenes de datos genómicos y transformarlos en información útil para los médicos, asegurando siempre la privacidad de los pacientes.

Un hito en esta área ha sido el trabajo del Atlas del Genoma del Cáncer, que ha recolectado información de casi 20.000 tumores y más de 11.000 pacientes con 33 tipos de cáncer. Este esfuerzo ha permitido entender mejor cómo se propagan ciertos tipos de cáncer y cómo algunos virus influyen en las mutaciones.

Gracias a la computación en la nube, se ha reducido el costo de la secuenciación del ADN de 1.000 dólares hace una década a solo 100 dólares en la actualidad, haciendo que este procedimiento sea más accesible. Este avance permite personalizar tratamientos con mayor precisión y mejorar las tasas de éxito en la terapia oncológica.

La IA al servicio del diagnóstico temprano

La detección temprana es fundamental para mejorar las tasas de supervivencia en pacientes con cáncer. La inteligencia artificial ha demostrado ser una herramienta crucial para identificar señales visuales de la enfermedad, incluso en etapas muy iniciales y en imágenes médicas que no fueron originalmente tomadas para diagnosticar cáncer.

Tradicionalmente, los patólogos analizaban muestras de tejido en portaobjetos de vidrio, un proceso que podía ser lento y sujeto a errores humanos. La digitalización ha permitido la aplicación de IA para el análisis de imágenes, facilitando diagnósticos más rápidos y precisos.

Michael Rivers, vicepresidente de Patología Digital en Roche Tissue Diagnostics, explica: “La digitalización ha abierto la puerta a la inteligencia artificial para mejorar la precisión del diagnóstico y optimizar los planes de tratamiento para los pacientes”. Su colaboración con AWS e Ibex ha llevado al desarrollo de herramientas basadas en IA que agilizan el trabajo en los laboratorios de patología.

Un claro ejemplo de esta tecnología es FxMammo, un algoritmo desarrollado en Singapur que mejora la detección del cáncer de mama en tejido mamario denso. Este sistema ha reducido los falsos positivos en un 75,5%, lo que permite diagnósticos más tempranos y confiables, algo crucial en regiones como América Latina y el Caribe, donde el cáncer de mama causó más de 100.000 muertes recientemente.

Atención médica más accesible gracias a la nube

El acceso a tratamientos oncológicos sigue siendo desigual en muchas partes del mundo. Con el aumento de los casos de cáncer, es esencial garantizar que más personas puedan recibir atención médica de calidad sin importar su ubicación o recursos económicos.

Tecnologías como las desarrolladas por Hurone AI, en colaboración con AWS, están ayudando a reducir las brechas en la atención médica mediante IA predictiva y modelos de lenguaje avanzados. Además, la expansión del acceso a tratamientos en casa y la telemedicina han permitido que los pacientes puedan recibir cuidados sin necesidad de desplazarse a hospitales, algo especialmente beneficioso para quienes viven en zonas rurales o con acceso limitado a centros especializados.

La nube como motor de esperanza en la lucha contra el cáncer

El cáncer sigue siendo una de las principales amenazas para la salud mundial, pero la combinación de innovación y tecnología está redefiniendo la manera en que se diagnostica y trata la enfermedad. La computación en la nube, junto con la inteligencia artificial y el análisis genómico, está dando nuevas esperanzas a millones de pacientes.

En este Día Mundial contra el Cáncer, es fundamental reconocer la importancia de estos avances y continuar impulsando el acceso equitativo a la atención médica para todos. La tecnología por sí sola no erradicará la enfermedad, pero sin duda está transformando la lucha contra ella, proporcionando herramientas más eficaces para salvar vidas.

*En la creación de este texto se usaron herramientas de inteligencia artificial.