Una empresa de biotecnología anunció la primera «desextinción» exitosa, tras el nacimiento de unos cachorros de lobo huargo, una especie que desapareció hace más de 10.000 años. Sin embargo, no todo sería como nos lo están contando.
Por: Dr. Pedro E. Romero, colaborador
La revista “Time” informó sobre la “desextinción” del lobo huargo (‘dire wolf’, en inglés). En su portada del 7 de abril del 2025 anuncia a Remo, uno de los tres lobos huargos, junto con Rómulo y Khaleesi que la compañía Colossal Biosciences afirma haber producido.
Estos parientes de los lobos, casi míticos, fueron popularizados en la serie de novelas “Juego de Tronos” de George R. R. Martin. En especial, Fantasma, el lobo huargo y albino, mascota de Jon Snow, es uno de los animales más recordados por el público.
¿Cómo (re)crearon a estos animales? De acuerdo con “Time”, el huargo se extinguió hace unos 10 mil años. Para traerlo de nuevo a nuestra era se utilizó ingeniería genética. Como molde se usó el genoma (o secuencia genética) del lobo gris (‘grey wolf’) pues, según Colossal Biosciences, es un pariente cercano al huargo. La referencia de cómo era genéticamente un huargo provino de restos fósiles prestados por museos.
Sin embargo, no se usaron realmente los genes encontrados en los fósiles para “resucitarlos”. Tomando las secuencias genéticas del lobo gris, se modificaron unos 14 genes asociados al tamaño del individuo, de sus dientes, a la musculatura de sus extremidades y su vocalización. Además, modificaron genes de pigmentación para obtener huargos blancos.
Algunas voces científicas consideran que este es un gran paso para la biología de la conservación. Una rama de la biología que lidia con un mundo en crisis en el que decenas a cientos de especies desaparecen ante nuestra atónita mirada. No todo es ‘hype’. Por ejemplo, el costo de producir estos individuos aún no permite que puedan ser hechos a mayor escala. Tampoco sabemos si será posible cruzar a Khaleesi con alguno de sus “hermanos”.
A pesar de lo rebotado por los medios, los tres cachorros no son huargos. Son lobos grises genéticamente modificados que tienen algunas mutaciones presentes en los huargos. Se pueden parecer externamente, pero genéticamente siguen siendo lobos grises. Beth Shapiro, una de los científicas a cargo del proyecto indicó que la diferencia genética entre los huargos y los lobos grises es de aproximadamente 0,5 %. Parece un número pequeño, pero al multiplicarlo por el tamaño del genoma del lobo gris (2.500 millones de letras) resulta en más de 10 millones de cambios o mutaciones entre ambas especies.
También, es difícil prever si los cambios realizados afectarán de alguna manera a los cachorros en el futuro. Los genes se encuentran funcionalmente conectados en redes metabólicas que el cambio de uno podría provocar una cascada de cambios en otras funciones importantes para el organismo.
Otro punto para tomar en cuenta es que realmente el lobo huargo no es un lobo y no es tan emparentado a los lobos grises. En el 2020, un artículo en “Nature” demostró que los huargos (antes ‘Canis dirus’, ahora ‘Aenocyon dirus’) son más cercanos a los chacales y otros lobos, por lo que utilizar al lobo gris como molde genético tampoco sería tan acertado.
Evolutivamente, las especies se generan a partir de ancestros comunes, por lo que para ser estrictos, lo informado por Colossal Biosciences sigue siendo un experimento de ingeniería genética en lobos actuales que una «desextinción».
Por ahora, el huargo sigue siendo un “Fantasma”. El poder de la biotecnología seguirá mostrándonos nuevos resultados en temas sobre clonación, pero aún es temprano para afirmar que ya podemos vencer a la pérdida de la biodiversidad.