Desde la aparición en una pequeña pantalla monocromática en las oficinas del diario El Comercio en 1995, hasta la omnipresencia de la inteligencia artificial generativa en 2024, la tecnología ha transformado radicalmente el periodismo y nuestra vida cotidiana. La foto de esta nota fue creada por el autor con inteligencia artificial generativa, vía Midjourney.
Por Juan Carlos Luján, colaborador.
Aquellos primeros días de internet, cuando 56 kbps era una velocidad impresionante, parecen ahora un recuerdo distante, eclipsado por las velocidades de conexión que pueden superar los 300 mil kbps en nuestros hogares. Aún recuerdo cuando por vez primera pisé la vieja sala de redacción del diario. Había máquinas de escribir para los practicantes y los periodistas que aún se rehusaban a usar las terminales Harris; ellos y esos equipos terminaron luego siendo reemplazados por computadoras personales en manos de jóvenes redactores.
El periodismo digital, una vez considerado una especialidad, se ha convertido simplemente en periodismo, integrado completamente en la práctica profesional. El periodismo sobre el papel aún se consume, pero todos sabemos que la tendencia de consumo está cambiando. La evolución tecnológica no se ha detenido; ha seguido avanzando a un ritmo vertiginoso, dando forma a un ecosistema digital compuesto por usuarios, fibra óptica, sitios web, redes sociales, comunidades, dispositivos móviles y aplicaciones.
La llegada de internet en 1994 marcó el comienzo de esta transformación, seguida por la revolución móvil con el lanzamiento del iPhone en 2008. Sin embargo, es la aparición de la inteligencia artificial generativa, especialmente desde noviembre de 2002 con ChatGPT de OpenAI, lo que representa la tercera gran revolución tecnológica. Esta era está definida por la competencia entre gigantes informáticos y la integración de modelos de lenguaje avanzados que maravillan tanto como lo hizo internet en sus inicios.
La inteligencia artificial generativa ha impactado todos los aspectos de la vida digital, desde cómo consumimos noticias hasta cómo interactuamos en línea. Ha democratizado el acceso a la información y ha proporcionado herramientas para que los periodistas creen contenido más profundo y accesible. La capacidad de generar texto, imágenes y sonidos a través de la IA está abriendo nuevas fronteras para la creatividad y la innovación. Y al igual que internet, el impacto afecta todas las profesiones. No podemos ignorarlo.
En este Día de Internet, celebramos no solo la tecnología que nos ha traído hasta aquí, sino también la promesa de lo que está por venir. La inteligencia artificial no es solo una herramienta; es un catalizador para una nueva era de descubrimiento y conexión humana, pero siempre con pensamiento crítico. A medida que miramos hacia el futuro, recordamos que todo esto se basa en la infraestructura que internet ha proporcionado, una plataforma que ha hecho posible innumerables avances y seguirá siendo la base sobre la cual construiremos nuevas experiencias.